Oración a San José del Papa Francisco en Patris Corde
Salve, custodio del Redentor y esposo de la Virgen María.
A ti Dios confió a su Hijo, en ti María depositó su confianza,
contigo Cristo se forjó como hombre.
Oh, bienaventurado José, muéstrate padre también a nosotros
y guíanos en el camino de la vida.
Concédenos gracia, misericordia y valentía,
y defiéndenos de todo mal.
Amén
Fuente: Vatican.va
Para pedir un favor a San José
Amadísimo Padre mío San José: confiando en el valioso poder que tenéis ante el trono de la Santísima Trinidad y de María vuestra Esposa y nuestra Madre, os suplico intercedáis por mí y me alcancéis la gracia... (hágase aquí la petición). José, con Jesús y María, viva siempre en el alma mía. José, con Jesús y María, asistidme en mi última agonía. José, con Jesús y María, llevad al cielo el alma mía. Padre Nuestro, Ave María y Gloria.
Fuente: Devocionario.com
Oración a San José por los pobres, por los enfermos y por los moribundos
Estos son la porción escogida de tu amor, excelso Patriarca, y en el cual muestras a menudo la eficacia de tu protección. Los que sufren estrechez y necesidad, los que padecen en el lecho del dolor corporales sufrimientos, los que en el trance duro de la muerte imploran tu consuelo. Te pedimos por ellos, mansísimo Padre de pobres, de enfermos y de moribundos; te pedimos por ellos, y por nosotros cuando nos hallemos en su aflictiva situación. Derrama sobre los corazones lacerados el bálsamo de la santa confianza en Dios; ahuyenta de ellos el negro demonio de la desesperación. Sonríe a los tristes con la dulzura de la esperanza; haz llegar a a los necesitados el pan de la caridad; anticipa a los ojos vidriados de los agonizantes un rayo de luz del paraíso que les está prometido. Padre Nuestro, Ave María y Gloria.
Fuente: Libro Año Sacro / ACI Prensa
Oración a San José por las órdenes religiosas
Las órdenes religiosas son, hoy día, bondadosísimo José, las privilegiadas de los rencores del infierno y de las sectas, y deben ser por lo mismo las privilegiadas de tus oraciones y de tu protección. La casa de Nazaret fue el primer ejemplar de la vida de religión y comunidad, y en ella se dieron los primeros modelos de la más perfecta observancia de los tres santos votos. Ampara a los miembros de las órdenes religiosas, protégelos, sálvalos. Consérvalos para gloria de Dios y para confusión de sus enemigos. Padre Nuestro, Ave María y Gloria.
Fuente: Libro Año Sacro / ACI Prensa
Oración a San José por diversas necesidades
Santo Patriarca, dignísimo esposo de la Virgen María y Padre adoptivo de Nuestro Redentor Jesús, que por vuestras heroicas virtudes, dolores y gozos merecisteis tan singulares títulos; y por ellos, especialísimos privilegios para interceder por vuestros devotos; os suplico, Santo mío, alcancéis la fragante pureza a los jóvenes y doncellas, castidad a los casados, continencia a los viudos, santidad y celo a los sacerdotes, paciencia a los confesores, obediencia a los religiosos, fortaleza a los perseguidos, discreción y consejo a los superiores, auxilios poderosos a los pecadores e infieles para que se conviertan, perseverancia a los penitentes, y que todos logremos ser devotos de vuestra amada Esposa, Maria Santísima, para que por su intercesión y la vuestra podamos vencer a nuestros enemigos, por los méritos de Jesús, y conseguir las gracias y favores que os hemos pedido para santificar nuestras almas hasta conseguir dichosa muerte, y gozar de Dios eternamente en el Cielo. Amén.
Fuente: Devocionario.com
Invocación a San José del Papa San Juan XXIII
¡San José, guardián de Jesús y casto esposo de María,
tú empleaste toda tu vida en el perfecto cumplimiento de tu deber.
Tú mantuviste a la Sagrada Familia de Nazaret con el trabajo de tus manos.
Protege bondadosamente a los que se vuelven confiadamente a ti.
Tu conoces sus aspiraciones y sus esperanzas.
Ellos se dirigen a ti porque saben que tu los comprendes y proteges.
Tú también supiste de pruebas, cansancio y trabajo.
Pero, aun dentro de las preocupaciones materiales de la vida,
tu alma estaba llena de profunda paz y cantó llena de verdadera alegría
debido al íntimo trato que gozaste con el Hijo de Dios
que te fue confiado a ti a la vez a María, su tierna Madre.
Fuente: Devocionario.com